Alimento para el cuerpo.
“Que tu alimento sea tu medicina”. Hipócrates.
Ya hace mucho tiempo que sabemos lo importante que es el comer bien.
Estamos en la era de los desequilibrios mentales y emocionales, y la sociedad es muy consciente de ello.
Hay una gran parte de la sociedad que está enganchada a sabores intensos, aromas deliciosos, especias, dulces, comidas que entran por los ojos…
Esta manera de comer ayuda a mantener este estado de desequilibrio emocional y mental. Y por supuesto tiene un efecto en la salud.
Hay una minoría creciente que empieza a ser consciente de hacia dónde nos lleva alimentarnos como hasta ahora y está en proceso de hacer grandes cambios.
Sinceramente no sé cuál de las tendencias actuales es la más equilibrada, pero independientemente de cuál sea la mejor, y no tengo la más mínima intención de entrar en discusión, lo importante es que se preocupan de lo que se come para un bien del individuo.
¿Habéis visto las cocinas de hoy en día? Son verdaderos laboratorios, la cocina ha sido siempre una alquimia. Proporciones exactas, cocciones precisas, perfección culinaria.
En mi casa hemos comido siempre de una manera “sana”, sin mucho conocimiento, pero “sana”. Desde niño mi intención o razón al comer era la de llenar la tripa para volver a llenarla al volver a tener hambre. La idea era llenar el tanque de combustible, sin mirar si era gasolina o diesel. No había el concepto de:
- piensa lo que vas a comer de manera que aporte lo que necesita tu organismo.
Esto es muy fácil de decir, pero no tan fácil de hacer correctamente.
Debes tener en cuenta que las necesidades son cambiantes en función de: el clima, de tu situación emocional (las alteraciones emocionales tienen un efecto en tu química), tu forma física, tu actividad física, tu nivel de estrés…
Para entenderlo mejor podemos imaginar que el cuerpo es electricidad, es energía, y está en un relativo equilibrio de cargas positivas y negativas, los alimentos al digerirse se convierten el iones asimilables por el organismo.
La enfermedad o síntoma es una buena manera para saber cómo se ha desequilibrado tu cuerpo y poder así darle medicina en forma de alimento.
Además es muy importante que el conjunto de los productos que vayas a ingerir esté en equilibrio entre sí y que como conjunto aporte equilibrio a tu organismo. Con lo cual deberás tener en cuenta lo que vas a comer y la manera cómo lo vas a cocinar, porque cada alimento tiene unas propiedades y se alteran con la modalidad de cocción.
Con toda esta cháchara no es mi intención daros soluciones al problema, tan solo quiero que empecéis a preguntaros si lo que coméis os está ayudando, no tan solo a llenar el agujero, sino a mantener vuestra salud en equilibrio.
¡Que aproveche!